La escuela para muchas personas es uno de los lugares más recordados, porque además de formarnos, en sus aulas, patios y galerías, se construyen amistades, afianzan vínculos, comparten experiencias y se viven historias que nos acampanarán durante toda de vida.
“Estudié en la Escuela Agraria en el año 1993, en ese momento no pude pagar la cooperadora porque no contaba con los recursos, creo que pagué 1° año ¿Usted puede corroborar?, porque ahora puedo pagar y deseo cancelar la deuda”, ese fue el mensaje que recibió la Directora de la Escuela Agraria de Dolores.
Superada la sorpresa por la consulta, las autoridades de la institución chequearon los datos y corroboraron que, el ahora ex alumno, había pagado dos años de Cooperadora.
Así fue como, Francisco Zych, no sólo saldó su deuda, sino que también, se inscribió como socio activo de la Asociación Cooperadora y ofreció su ayuda para lo que la escuela necesite y esté a su alcance.
Según indicó la Directora, con lo abonado, se compraron los dedos para la peladora de aves y porcinos, que hace mucho tiempo se necesitaba pero no contaban con los recursos necesarios para poder comprarlos.
En la publicación realizada en las redes sociales con mucha alegría agradecieron el gesto y agregaron: “Francisco, no te conocemos personalmente, pero te damos la bienvenida a nuestra Familia Agraria."
Una acción para destacar que, sin dudas, excede el saldo de una deuda económica, y se convierte en una gran demostración de gratitud.