La tragedia ocurrió en la fiesta aniversario de Villa Puente Picún Leufú, en Neuquén, donde un nene de 14 años murió después de que el caballo que montaba se le cayera encima y lo aplastara.
El hecho ocurrió luego que el padre del pequeño autorizó la salida del animal y en una maniobra típica de una jineteada el caballo tiró al nene hacia atrás y luego cayó sobre el cuerpo del menor.
Finalmente el niño falleció debido a las múltiples lesiones internas.
Este trágico hecho volvió a instalar la polémica sobre la autorización o prohibición de las jineteadas en todo el país.